La etiolación y cómo prevenirla en cactus y suculentas
¿Sabéis qué es la etiolación? Se trata de un suceso que podría afectar a vuestros cactus o suculentas en algún momento de su vida, y que también se da en la naturaleza. ¿Os interesa saber más? ¡Seguid leyendo!
¿En qué consiste la etiolación?
La etiolación es una consecuencia que tiene lugar cuando las plantas se encuentran en ausencia de luz de forma prolongada, y que puede darse en toda la planta o solo en una parte concreta de ésta. Es habitual en plantas que han crecido en plena oscuridad, con insuficiencia de luz, ya que esto las lleva a iniciar un mecanismo de respuesta para adaptarse a ese ambiente y poder así desarrollarse y sobrevivir.
La etiolación es frecuente en cactus y suculentas que se cultivan en interiores, ya que reciben menos luz que en el exterior y, a veces, puede resultarles insuficiente.
La etiolación debe tratarse a tiempo, ya que debilita a la planta a la cual afecta y, por ende, hace que ésta sea más susceptible de tener otros problemas y complicaciones.
¿Cómo podemos identificar la etiolación en nuestros cactus y suculentas?
La necesidad de las plantas de desarrollarse en un entorno sin luz hace que se produzcan crecimientos anormales y pérdida de color o palidez, por lo que, si observamos alguno de estos signos en nuestros cactus y suculentas, puede significar que empiezan a etiolarse.
En el caso de los crecimientos anormales, los tallos pueden verse más débiles, quebradizos, alargados y delgados, o inclinarse hacia un lado. Esto es consecuencia de estar en busca desesperada de una fuente de luz, lo que lleva a que las plantas se estiren perdiendo su forma original.
Por lo que respecta a la pérdida de color y palidez de la planta, es causada por la poca clorofila que ésta es capaz de producir, la sustancia causante de la pigmentación, al estar en condiciones lumínicas tan escasas. De esta forma, si observamos que nuestros cactus y suculentas empiezan a ponerse blanquecinos, también puede venir dado por la etiolación.
Otros signos que podemos observar y que podrían significar un inicio de etiolación serían: malformaciones en las espinas, que no se produzca la floración, etc.
¿Cómo la prevenimos y evitamos?
La respuesta lógica a la pregunta es que debemos dar luz a la planta.
Si recibe la cantidad de luz solar necesaria para desarrollarse adecuadamente, no tendrá lugar la etiolación. Para ello, habrá que atender a las necesidades y requerimientos de iluminación particulares de cada especie y basarnos en ello a la hora de ubicar la planta, para que allí donde esté pueda recibir la cantidad de luz que necesita. Tampoco debemos sobreexponer la planta a la luz, ya que entonces podrían producirse quemaduras en ésta, lo “opuesto” a la etiolación.
Para prevenir la etiolación es importante fijarse en el aspecto del cactus o suculenta de manera recurrente y, si observamos que aparece alguno de los signos de etiolación mencionados anteriormente, solucionar el problema a tiempo y evitarlo.
También es relevante que respetemos el periodo de reposo de cada especie.
Por último, cabe señalar que influye la dirección de la luz que alcanza a las plantas, pues éstas se inclinarán hacia la fuente de iluminación. Para evitar que los cactus y suculentas se deformen y pierdan su estructura natural a consecuencia de esto, es conveniente girarlos periódicamente. Así conseguiremos que conserven su forma.
¿Cómo “arreglamos” una planta etiolada?
Para “arreglar” o detener la etiolación de una planta, ésta se debe someter a las condiciones óptimas de luz solar que necesita.
Esto dará lugar a que se produzca la “desetiolación”, el proceso necesario para revertir la etiolación. Si hacemos esto, la planta comenzará a desarrollarse de manera natural de nuevo y, por ende, adquirirá una coloración más verde, producirá más hojas, quizás florecerá y los nuevos tallos adoptarán una longitud normal, aunque la parte etiolada de crecimiento anormal no se recupera y debe podarse.
Algo importante a tener en cuenta es que el cambio a una situación de más luz debe ser gradual, paulatino, y no hacerse de golpe, ya que sino la planta podría sufrir quemaduras.
¡Curiosidad sobre la etiolación!
La etiolación es utilizada para hacer el “frijol chino”, una comida tradicional de este país. Germinan las semillas en plena oscuridad para que crezcan afectadas por este suceso y después se emplean para el consumo. ¿A que resulta muy curioso?
Esperamos que este artículo te ayude a evitar o revertir la etiolación en tus plantas de interior. Si te ha quedado alguna duda al respecto, ¡consúltanos! Te atenderemos encantados. Y si estás pensando en ampliar tu colección, recuerda que puedes hacerte con gran variedad de cactus y suculentas en la web de La Tienda del Cactus.
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